Arriba Nadia con su hermano en la puerta de casa, y en la imagen inferior Nadia con sus abuelos el día de su primera comunión.

Cuando fuí a recoger en pijama por la noche una puerta del contenedor de enfrente del bar Billares porque mi prima se empeñó en que quería la puerta para pintarla.  Y otro recuerdo bonito es cuando pescamos unos pantalones de fútbol del Manisense de mi hermano con una caña de pescar en la terraza, porque se habían volado.